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quinta-feira, 7 de abril de 2016

O Mercosul em dois tempos - Renato Marques (ex-negociador pelo Brasil)

Renato Marques tem um livro sobre o Mercosul, que eu recomendo:
Duas Décadas de Mercosul (São Paulo: Aduaneiras, 2011, 368 p.; ISBN: 978-85-7129-581-0).
Fiz uma resenha desse livro, quando de sua primeira publicação, em edição do autor, na Ucrânia, e essa resenha está em meu livro "Prata da Casa", que pode ser acessado nestes links:
página do livro: https://www.academia.edu/5763121/Prata_da_Casa_os_livros_dos_diplomatas_Edicao_de_Autor_2014_; link direto para download do arquivo em pdf: https://www.academia.edu/attachments/34209509/download_file?s=work_strip&ct=MTQwNzAwODExOCwxNDA3MDExMjI5LDc4NTEwNjY; divulgado neste link: http://diplomatizzando.blogspot.com/2014/07/prata-da-casa-os-livros-dos-diplomatas.html; disponível em Researchgate.net: https://www.researchgate.net/publication/269701236_Prata_da_Casa_os_livros_dos_diplomatas?ev=prf_pub. 
Paulo Roberto de Almeida  


EL MERCOSUR EN DOS TIEMPOS
Renato L. R. Marques
El Litoral (Santa Fe, Argentina), 8/04/2016

Los negociadores del Tratado de Assunción - que ha creado el Mercosur, hacen 25 años - tendrán distintos motivos para celebrar la fecha, según sus expectativas y motivaciones. Habiendo integrado ese grupo desde sus comienzos, creo no cometer equívocos al decir que todos los integrantes de los equipos técnicos – en que pesen sus diferencias puntuales - estuvieran movidos por un sentimiento de participación en un grand design, en un proyecto histórico y transcendiente, que iba más allá de la tradicional coreografia integracionista latino-americana, marcada por una retórica grandiloquente y minguados resultados. Nutrian así una firme convicción de que el proyecto deberia firmarse progresivamente, sin atropellos, vale decir, sin atender a los reclamos de los que insistian en que mimetizase el modelo europeo desde su início y adoptase inmediatamente instituciones supranacionales, como las creadas por el Tratado de Roma. De esas visiones maximalistas – típicas del character romántico de los ensayos integracionistas anteriores – surgieran las críticas iniciales a la institucionalidad en gestación.
Buscabase superar años de retraso en el aprovechamiento de las complementariedades regionales, cerceadas por viejos planes de sustitución de importaciones y rivalidades politicas. Así como promover la competencia a través de la apertura de los mercados intraregionales y de su mayor exposición al exterior. No por acaso, vários sectores de las economias de cada uno de los sócios se mobilizó, en un primer momento, contra la iniciativa.
Las mudanzas sufridas por el proyecto original son facilmente explicables por los cambios hacia la izquierda ocurridos en los gobiernos de la region. La dimensión económico y comercial del Mercosur cedió lugar a una cresciente orientación política y social, al punto del Mercosur tornarse casi un accesorio de instituciones más recientes, como la UNASUR. La vocación autárquica y proteccionista de eses régimenes accentuaron la proliferación de medidas restrictivas al comercio intra-bloco, generaron una cresciente desarmonización del Arancel Externo Comum (AEC) y no han creado mecanismos para facilitar la deseada complementariedad. El grán éxito apuntado en el comércio automotivo poco o nada debe a los gobiernos. Su intercámbio está regido por distintos Acuerdos de Complementación Económica en el ámbito de ALADI (fuera por lo tanto del Mercosur), que reflejan la estratégia de distribución espacial de la producción de las multinacionales en la región, con reglas de administración del comércio no siempre acceptadas por la OMC,  pero que operan con la misma funcionalidad verificada en los viejos Acuerdos Sectoriales de la extinta ALALC – de los cuales, el de maquinas de oficina es el gran modelo. No sorprende así que las exportaciones brasileñas para el grupo estén al nível de 2006, cuando alcanzó US$ 12 mil millones, y que el ritmo de crescimiento de nuestro comércio con la región esté muy abajo del registrado con otras partes del mundo. Como si no fuera poco, el Mercosur favoreció incursiones políticas controvertidas al suspender el Paraguay y al promover el ingreso de Venezuela con critérios de naturaleza más ideológicos que técnicos.
Todo eso parece alertar para la necesidad de rever las condiciones de funcionamiento del Mercosur, para que pueda retomar sus objetivos originales de estímulo a las actividads económicas de sus sócios y de aprovechamiento de las ventajas comparativas regionales. Para eso, el Mercosur no debe cerrarse en sí mismo y sí actuar como un instrumento para facilitar la inserción de sus integrantes en las grandes cadenas de producción globales. Esto implicará una mayor liberdad de acción para sus miembros, de modo a evitar las dificuldads de negociación impuestas por el hetereogeneo conjunto. Tratase de liberar el dinamismo de cada una de las economias ante los desafios impuestos por una coyuntura que seguramente no es propícia a todos en este momento. Para tanto el Mercosur tendrá que superar su crisis y buscar una nueva identidade, más apropriada a los nuevos tiempos. Caso contrario, el Mercosur – a pesar de todo el ruído generado – tenderá a se conformar a más un producto de esos sucesivos partos de los montes de la malograda história de la integración regional latino-americana.
                                                              
Renato L. R. Marques es Embajador retirado y negociador de los principales acuerdos constitutivos del Mercosur, desde los primórdios en 1989 hasta 1999.


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